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El tatami japonés para masajes eróticos es una superficie ideal porque permite que la masajista pueda interactuar con total libertad de movimiento con el cliente. Se trata de masajes muy cercanos, con alta actividad física que, al mismo tiempo, se realizan con suavidad y con alto nivel de contacto.
Un tatami japonés es una superficie ideal para dar masajes. Permite a la masajista tomar posiciones naturales que favorecen una mejor interacción con el cliente. Al estar cerca del suelo la masajista puede ampliar el rango de movimiento e interactuar con absoluta libertad.
El cliente, por su parte, se coloca en el centro del tatami con máxima comodidad y espacio a ambos lados de su cuerpo. Al ser una superficie amplia y confortable, la masajista puede desplazarse de forma sutil alrededor del cuerpo facilitando una interacción total que eleva considerablemente la calidad del masaje.
Sobre un tatami se pueden practicar todo tipo de masajes. A continuación destacamos algunos de los masajes eróticos de Masajes Shiva que mejor resultado ofrecen sobre esta superficie:
Los tatamis pueden tener múltiples medidas. Pero en el caso de un tatami japonés para masajes debe tener amplitud. Debe permitir la interacción entre la masajista y el cliente con espacio suficiente, por lo que se recomienda unas medidas de 200x150 cm.
En cuanto al grosor debe ser lo suficiente para elevarse por el suelo sin pérdida de comodidad. Aunque no de forma excesiva, para facilitar los desplazamientos de la masajista alrededor de la persona que está recibiendo el masaje. Hablamos de una elevación sobre el suelo de 20 cm.
Existen multitud de tipos de tatami. Por ejemplo, tenemos los de tipo puzzle. Sin embargo, son de un grosor no indicado para dar masajes. Al no contar con una zona acolchada de mayor grosor, no aportan todo el confort que requiere un masaje erótico de calidad. En estos, el cliente debe de encontrarse como si estuviera en una cama. Una superficie que, en definitiva, permita relajarse y descansar, para vivir una experiencia placentera.
Se asemejarían más a una especie de esterilla. Una superficie más adecuada para realizar ejercicios, por ejemplo. Pero no para recibir un masaje erótico del nivel con el que se imparten en Masajes Shiva.
De mayor grosor que los anteriores, y fácilmente instalables y sencillos de limpiar. Pero, en cualquier caso, alejados de los tatamis de máxima calidad y confort que utilizamos en nuestras instalaciones. De nuevo debido a las necesidades específicas y calidad de las masajistas que realizan sus funciones en nuestro centro.
Más allá de los masajes eróticos, en un tatami se pueden realizar otro tipo de usos y actividades. En la mayoría de las ocasiones, ligados al deporte y, más concretamente a algunos deportes de contacto, como por ejemplo: